José Olaya de la Flor, guardia civil de 28 años, natural de Madrigal de la Vera, Cáceres, casado y con una hija, fue asesinado por el Comando Vizcaya el 14 de mayo de 1981. Una bomba alcanzó su coche mientras escoltaba, junto a dos compañeros, un transporte de explosivos en Lemona. Manuel Sánchez Borrallo también murió en el acto, mientras que Anselmo Jiménez Aller resultó gravemente herido.
Enrique Letona Viteri fue condenado a dos penas de 29 años y a 19 más por asesinato frustrado. No pagó las correspondientes indemnizaciones económicas al declararse insolvente.
Véase también Manuel Sánchez Borrallo.